La raza ovina Highlander, originaria de Nueva Zelanda, ha emergido como una de las opciones más prometedoras para productores ovinos a nivel mundial. Desde su creación en 2001 por Rissington Breedline Ltd (RBL), la oveja Highlander ha captado la atención de la industria ovina global debido a su destacada capacidad para mejorar la eficiencia reproductiva, la adaptabilidad y la rentabilidad en la producción de carne ovina.
Origen y Desarrollo de la Raza Highlander
La Highlander es una raza sintética creada mediante la combinación de genética de varias razas ovinas. Fue desarrollada para maximizar la productividad y eficiencia en la producción ovina, sin sacrificar la calidad de la carne. Las razas que contribuyeron al desarrollo de la Highlander incluyen la Romney (25%), conocida por su rusticidad y producción de lana, la Finnish Landrace (50%), reconocida por su alta fecundidad y tamaño eficiente, y la Texel (25%), valorada por su aptitud cárnica y resistencia.
La creación de los ovinos Highlander se centró en combinar las mejores características de estas razas para producir una oveja que no solo fuera prolífica, sino que también tuviera una alta tasa de supervivencia de los corderos, una excelente conformación carnicera y una gran capacidad de adaptación a diversas condiciones climáticas.
Características Específicas de la Raza Highlander
Prolificidad y Supervivencia: La Highlander es ampliamente reconocida por su alta prolificidad. Las ovejas de esta raza tienen una tasa de preñez que supera el 180%, y la tasa de señalada (corderos destetados por oveja) alcanza el 150%, con no más del 10-12% de trillizos. Esta alta prolificidad se traduce en un mayor número de corderos por oveja, lo que incrementa significativamente la rentabilidad para los productores. Además, la Highlander es conocida por su alta tasa de supervivencia de los corderos, lo que asegura que la mayoría de los corderos nacidos lleguen a la etapa de destete.
Precocidad y Crecimiento: Otra característica destacada de la Highlander es su precocidad sexual. Las ovejas alcanzan la madurez sexual entre los 6 y 7 meses de edad, con un peso de aproximadamente 40 kg, lo que les permite ser cubiertas a una edad temprana. Esta precocidad contribuye a acelerar el ciclo productivo y a aumentar la eficiencia general del rebaño. Además, la Highlander presenta una alta tasa de crecimiento de los corderos, lo que significa que los corderos alcanzan el peso de mercado más rápidamente que muchas otras razas. Esto es particularmente ventajoso en sistemas de producción donde el tiempo es un factor crítico para la rentabilidad.
Peso: En cuanto a la estructura física, las hembras adultas de la raza Highlander alcanzan un peso promedio de 65 a 75 kg, lo que las convierte en una opción eficiente y robusta para la reproducción. Los machos, por su parte, son más corpulentos, con un peso que oscila entre los 90 y 100 kg. Esta diferencia en tamaño y peso entre los sexos es típica de la raza y contribuye a su capacidad para producir corderos de alta calidad, con un excelente rendimiento cárnico.
Calidad de la Carne: La Highlander produce corderos con una excelente conformación carnicera, caracterizada por una relación carne-hueso muy favorable. La carne de Highlander es conocida por su jugosidad y sabor, lo que la convierte en una opción preferida tanto en mercados locales como internacionales. La estructura corporal robusta y bien proporcionada de la Highlander permite la producción de carne de alta calidad sin necesidad de una suplementación intensiva, lo que la hace más sostenible y rentable para los productores.
Adaptabilidad y Resistencia: La Highlander ha demostrado una notable capacidad de adaptación a diversas condiciones climáticas y sistemas de manejo. Esta raza es especialmente adecuada para regiones con variabilidad ambiental, gracias a su rusticidad y capacidad para prosperar en pasturas de baja calidad. En Uruguay, por ejemplo, la Highlander ha mostrado una excelente adaptación a las condiciones locales, lo que ha permitido su rápida adopción por parte de los productores.
Lana: Aunque las ovejas Highlander se destaca principalmente por su producción de carne y alta prolificidad, también produce un vellón de lana extra blanco que pesa entre 2,5 y 3 kg por esquila. La lana de las Highlander tiene una finura que varía entre 28 y 32 micras, lo que la hace adecuada para ciertos usos textiles. Si bien la lana no es el foco principal de la producción de esta raza, su calidad es un valor añadido para los productores que buscan aprovechar todos los recursos de sus rebaños.
Alta tolerancia al pietín: Una de las ventajas menos conocidas pero sumamente valiosas de la raza ovina Highlander es su alta tolerancia al pietín, una enfermedad que afecta los cascos de las ovejas y que puede causar cojeras y pérdidas significativas en la productividad. La resistencia natural de los borregos Highlander a esta afección reduce la necesidad de tratamientos veterinarios y contribuye a mantener a los rebaños saludables y activos, lo que a su vez mejora la rentabilidad del productor. Esta característica es especialmente relevante para aquellos que operan en regiones donde el pietín es común, asegurando un rebaño más robusto y con menores tasas de incidencia de enfermedades.
Mejoramiento Genético: El programa de mejoramiento genético de la Highlander es uno de los más avanzados en la industria ovina. En Nueva Zelanda, los criadores utilizan tecnologías de vanguardia, como pruebas de paternidad mediante ADN y marcadores moleculares para la resistencia a enfermedades, con el fin de mejorar continuamente la raza. En Uruguay, donde la Highlander ha sido introducida con éxito, los productores han conformado un núcleo genético que sigue estas prácticas, asegurando que la raza mantenga su eficiencia y productividad en el contexto local.
Impacto en la Producción Ovina en Uruguay
La introducción de la raza Highlander en Uruguay en 2005 ha generado un impacto significativo en la industria ovina local. Desde entonces, la Highlander ha sido adoptada ampliamente por productores interesados en mejorar la eficiencia reproductiva y la rentabilidad de sus rebaños. El Programa Highlander en Uruguay, establecido para promover la raza, tiene como objetivo “producir madres de alta prolificidad y eficiencia en la producción de corderos”. Los resultados obtenidos hasta la fecha han sido muy positivos, con un aumento en la producción de corderos y mejoras en la eficiencia del sistema de producción ovina.
Uno de los aspectos más destacados del impacto de la Highlander en Uruguay es su capacidad para mejorar la eficiencia de los sistemas de producción extensivos y semi-intensivos. Los productores que han adoptado la raza han reportado un aumento en la rentabilidad debido a la mayor cantidad de corderos destetados por oveja y a la excelente calidad de la carne producida.
Además, la Highlander ha sido utilizada en programas de cruzamiento para mejorar las razas locales. Los cruzamientos con la Highlander han demostrado ser efectivos para mejorar la conformación carnicera y la eficiencia reproductiva de las razas locales, lo que ha llevado a un incremento en la producción total de carne y a una mejora en la competitividad de los productores uruguayos en los mercados internacionales.
Perspectivas Futuras para la Raza de Ovinos Highlander
A medida que la demanda mundial de carne ovina de alta calidad continúa creciendo, la raza Highlander está bien posicionada para desempeñar un papel crucial en la satisfacción de esta demanda. La combinación de alta prolificidad, excelente conformación carnicera y adaptabilidad hace que la Highlander sea una opción atractiva para productores de todo el mundo que buscan maximizar la rentabilidad de sus explotaciones.
En Uruguay, se espera que la raza Highlander continúe expandiéndose a medida que más productores reconozcan los beneficios de su adopción. La capacidad de la Highlander para mejorar la eficiencia reproductiva y la calidad de la carne la convierte en una opción ideal para los sistemas de producción extensivos y semi-intensivos que predominan en el país.
A nivel global, la Highlander también está ganando popularidad en otros países con condiciones de producción ovina similares. En mercados como Australia, el Reino Unido y Sudáfrica, donde la producción ovina es una industria importante, la Highlander ha demostrado ser una raza versátil y eficiente, capaz de mejorar la productividad y la rentabilidad.
La raza de ovejas Highlander representa una innovación significativa en la producción ovina global. Su alta tasa de fertilidad, su adaptabilidad a diversas condiciones climáticas y su capacidad para producir carne de alta calidad hacen de la Highlander una opción ideal para productores que buscan mejorar la eficiencia y la rentabilidad de sus explotaciones.
Desde su introducción en Uruguay, la Highlander ha demostrado ser una raza altamente eficiente y rentable, con un impacto positivo en la industria ovina local. A medida que más productores adoptan esta raza, se espera que su influencia continúe creciendo, fortaleciendo la competitividad de la industria ovina a nivel mundial.
Con su combinación de eficiencia reproductiva, calidad de carne y adaptabilidad, la Highlander está bien posicionada para satisfacer las demandas de un mercado global en constante evolución, asegurando su lugar como una de las razas ovinas más importantes del mundo.
Puedes descargar OvinApp desde el Apple Store o desde Google Play, dependiendo del dispositivos que tengas, haciendo clic en las siguientes imágenes.